Humo blanco
La “fumata blanca” es uno de los acontecimientos más icónicos y esperados en el contexto de la elección de un nuevo Papa en la Iglesia católica. Este símbolo indica que un nuevo pontífice ha sido elegido por los cardenales reunidos en cónclave y que la Iglesia tiene un nuevo líder espiritual. A lo largo de la historia se han producido algunas fumadas blancas especialmente esperadas y memorables, así como la primera fumada blanca retransmitida en directo por televisión.
Símbolo de la elección papal
El humo blanco es el resultado de una antigua tradición que se remonta a siglos atrás. Durante el cónclave, los cardenales se reúnen para votar en secreto al nuevo Papa. Cada vez que se vota, las tarjetas de votación se queman junto con productos químicos especiales que producen el color del humo. El humo negro indica que ningún candidato ha obtenido el número de votos necesario para ser elegido, mientras que el humo blanco anuncia que se ha elegido con éxito un nuevo Papa.
El más esperado: el Papa Pío XII
Uno de los casos más conocidos de fumata blanca especialmente esperada se produjo durante la elección del Papa Pío XII en 1939. El cónclave para la elección del sucesor de Pío XI comenzó el 1 de marzo de 1939. La larga duración del cónclave se debió en parte a las divisiones en el seno del Colegio Cardenalicio y a la compleja dinámica política de la época, en particular el clima de tensión internacional previo al estallido de la Segunda Guerra Mundial.
Tras numerosas votaciones infructuosas, la fumata blanca fue finalmente vista sobre la Capilla Sixtina el 2 de marzo de 1939, diez días después del inicio del cónclave. Esta larga espera había mantenido en vilo al mundo entero, y el anuncio de la elección del Papa Pío XII fue acogido con gran interés y alivio.
Estreno en directo: Papa Juan Pablo I
La primera fumata blanca retransmitida en directo por televisión tuvo lugar durante la elección del Papa Juan Pablo I en 1978. Fue un momento histórico, ya que supuso un paso importante hacia la modernización de las comunicaciones en la Iglesia católica. Durante este cónclave, se permitió a las cámaras filmar la Capilla Sixtina mientras salía humo de la chimenea de la Sixtina.
Fue visto en todo el mundo, seguido del anuncio inmediato de la elección del Papa Juan Pablo I. Este acontecimiento constituyó una importante ocasión de trascendencia mediática y simbólica, ya que abrió el camino a una mayor transparencia y a compartir con el mundo exterior los acontecimientos ocurridos en el seno de la Iglesia.
Desde entonces, la práctica de retransmitir la fumata blanca en directo por televisión se ha convertido en la norma durante los sucesivos cónclaves papales, incluidos los que condujeron a la elección del Papa Juan Pablo II, el Papa Benedicto XVI y el Papa Francisco.
En conclusión
La “fumata blanca” es un símbolo icónico de la elección de un nuevo Papa en la Iglesia Católica, que anuncia que se ha elegido a un nuevo líder espiritual. A lo largo de la historia, ha habido algunos acontecimientos de fumata blanca especialmente esperados y memorables, como la elección del Papa Pío XII en 1939 y la primera fumata blanca retransmitida en directo por televisión durante la elección del Papa Juan Pablo I en 1978. Estos acontecimientos contribuyeron a captar la atención del mundo y a hacer el proceso de elección papal más transparente y accesible globalmente.